Carta Pastoral: El rezo del Santo Rosario
27 septiembre de 2011Jaén, 22 de septiembre de 2011
Queridos fieles diocesanos:
A las puertas del mes de octubre, consagrado por el Papa León XIII como mes del rosario, me dirijo a todos vosotros para invitaros a cultivar en los Templos, familias e individualmente su rezo diario.
1. Es una devoción sencilla y bella a la vez que muchos conocemos por experiencia desde niños seguramente. Es la corona de rosas con que honramos y alabamos a nuestra Madre del cielo. Pero no es sólo una forma de devoción a la Virgen Santísima, sino también la contemplación de nuestra historia de la salvación a través de los misterios de la vida, muerte y resurrección del Señor Jesucristo presente entre nosotros.
Toda la vida de la Santísima Virgen sucedió en razón de su Hijo, asociada a Él desde su Inmaculada Concepción hasta su Asunción al Cielo, desde donde intercede por nosotros para siempre. Por eso, recitar el Rosario, es contemplar de su mano el Santo Rostro de Cristo.
2. Dichoso quienes permanecen fieles a esta hermosa devoción mariana y meditan diariamente la vida de Cristo hecho hombre “por nuestra salvación”. Bien hecha esta oración nos lleva a identificarnos y comprometernos a seguirle en su entrega y es estímulo para seguir esa misma historia de amor entre nosotros.
Su Santidad, Benedicto XVI, en un viaje a la ciudad de Pompeya el 19 de octubre de 2008 nos dijo que “el Rosario es escuela de contemplación y de silencio… En realidad, comentó, la cadenciosa repetición del Ave María no turba el silencio interior, sino que lo busca y alimenta. De la misma forma que sucede con los Salmos cuando se reza la Liturgia de las Horas, el silencio aflora a través de las palabras y las frases, no como un vacío, sino como una presencia con que trasciende las mismas palabras y junto a ellas habla el corazón”.
3. En este curso pastoral que estamos empezando, centrado este primer año de nuestro Plan Pastoral en reflexionar y animar a los cristianos laicos en sus tareas evangelizadoras, tenemos la ocasión no sólo para solicitar de nuestra Madre Santísima las gracias divinas a través de ese compromiso de los laicos bautizados, sino también para acercarles, mediante la introducción a cada misterio del Santo Rosario con el pasaje correspondiente evangélico, y afianzar e impulsar su espíritu misionero en el mes también de las misiones.
4. Con esta ocasión les anuncio dos celebraciones especiales que tendrán lugar en la Catedral a las que podrán unirse cuantos lo deseen, sobre todo desde las Parroquias y Comunidades de la Ciudad de Jaén.
+ El día 8, a las 19, 30, Misa de acción de gracias por parte, sobre todo de los jóvenes, por la reciente Jornada Mundial de la Juventud. En la misma se hará entrega y se venerará la reliquia del Beato Juan Pablo II que desde la Secretaría de Estado del Vaticano nos han enviado a la Diócesis de Jaén.
+ El día 22, a las 20 horas, se celebrará también una solemne Misa de acción de gracias por la Beatificación de Juan Pablo II, que tantas veces animó al rezo del santo Rosario durante su prolongado pontificado y que él mismo rezaba diariamente. Regaló a la Iglesia la profunda Carta Apostólica “Rosarium Virginis Mariae”, declarando el año 2002-2003 “Año del Rosario”.
Que el rezo especial del Santo Rosario durante el próximo mes de octubre nos ayude a avanzar como discípulos de Cristo, como testigos y enviados suyos, en la peregrinación de nuestra fe, precedidos por la Santísima Virgen del Rosario.
Con mi saludo y bendición.
+RAMÓN DEL HOYO LÓPEZ, OBISPO DE JAÉN