105 fieles de San Pedro Poveda de Jaén reciben la fuerza del Espíritu en el Sacramento de la Confirmación
15 mayo de 2018La Catedral de Jaén acogió la celebración del Sacramento de la Confirmación de más de un centenar de fieles de la Parroquia de San Pedro Poveda de la capital jiennense. En una Eucaristía, presidida por el Obispo de Jaén, Don Amadeo Rodríguez Magro, y concelebrada por el párroco de San Pedro Poveda, D. Julio Segurado; el Vicario General y Deán, D. Francisco Juan Martínez Rojas; el párroco de Santa Isabel, D. Francisco Carrasco; así como el Prefecto de Liturgia, D. Manuel Carmona. Catequistas, padrinos, familiares y amigos de los 105 confirmandos quisieron ser testigos de la administración de este Sacramento, el último de los considerados como de iniciación cristiana.
El Obispo, asperjó a los presentes con agua bendita, recordando la de su bautismo, agua y Espíritu por el que fuimos hechos hijos de Dios.
Las lecturas estuvieron participadas por fieles de la Parroquia de San Pedro Poveda, y el Evangelio proclamado por D. Francisco Cuadros Carrasco.
Antes de dar inicio a la homilía, el párroco de San Pedro Poveda, en su nombre y en el de los catequistas y en el de la Comunidad Parroquial, presentó ante el Obispo a los candidatos a recibir el Sacramento de la Confirmación, pidiendo al Pastor diocesano «que les imponga las manos y los unja en la frente con el signo de la cruz, para que reciban el Espíritu de la verdad y del amor, el Espíritu de la fortaleza y de la santidad, que les capacite para ser testigos valientes de Cristo en el mundo que les toca vivir».
A continuación, unos confirmandos en nombre de todos sus compañeros dieron lectura a un manifiesto en el que se indicaban cuáles eran las motivaciones para recibir este Sacramento, así como los compromisos que adquirían con la unción del óleo santo.
Homilía
El Obispo comenzó felicitando al párroco de San Pedro Poveda «por la cosecha tan abundante» de fieles que iban a recibir la Confirmación y con ella los compromisos cristianos que contraen como miembros de la Iglesia. A la vez que les recordó que el Sacramento que iban a recibir los iba a llevar «a tener un encuentro personal y comunitario con Dios, y en concreto con la tercera persona de Dios, con el Espíritu Santo; y que además la vais a llevar ya que es una marca indeleble en nuestro corazón y en nuestra vida, que lo vais a llevar siempre. Porque los Sacramentos son para vivir y para ser».
Don Amadeo hizo un breve repaso por los Sacramentos que a lo largo de su corta vida ya habían recibido, a la vez que les recordó que «son amados por Dios», para continuar diciéndoles, «Y que a pesar de las dificultades, de las luchas y de los esfuerzos, de las tareas, Dios está con nosotros. Aun cuando nosotros nos olvidemos de Él, siempre sentimos que Dios no se ha alejado. Dios y el amor de Dios está reflejado perfectamente en el amor que un padre y una madre ponen por sus hijos».
Por último, les invitó a que «abráis vuestro corazón y vuestra vida al Espíritu Santo y que viváis de lo que Él os va a ofrecer. De los dones que el Espíritu os va a ofrecer, porque ser cristiano es un modo de ser y un modo de vivir».
A la vez que envió un mensaje a los padres y familiares de los que iban a recibir el Sacramento de la Confirmación: «Decidle a vuestro hijos que merece la pena seguir a Cristo, que tiene sentido, que es un gran valor para su vida, y dadle ejemplo de vida cristiana, todo eso podremos hacerlo si confiamos en el Espíritu Santo».
Al finalizar las palabras del Obispo, los confirmandos se pusieron en pie, para renovar las promesas del Bautismo. Después para recibir la imposición de manos, para a continuación, llevar a cabo la imposición de las manos.
El Obispo, Don Amadeo, junto al Vicario General, fueron marcando a los confirmandos con el óleo santo en la frente, recibiendo así el sello del Espíritu Santo.
La oración de los fieles la realizaron fieles de la Parroquia de San Pedro Poveda, y las ofrendas fueron llevadas ante el altar por los jóvenes que habían recibido el Sacramento.
Antes de concluir la Eucaristía, un grupo numeroso de jóvenes Kairós de la Parroquia dieron su testimonio de vida y animaron a los nuevos confirmados a participar en este grupo de adolescentes.
Por último, y antes de la foto de familia, el Obispo les entregó unos diplomas de recuerdo a los catequistas que habían acompañado a los confirmandos en su camino de formación para que estos hicieran entrega a cada uno de los jóvenes que habían recibido el Sacramento.
La celebración contó con el acompañamiento musical del coro de adultos de la Parroquia de San Pedro Poveda.
Galería Fotográfica: «Confirmaciones de San Pedro Poveda en la Catedral -2018»