Se inaugura el curso en el Seminario con la mirada puesta en la promoción de las vocaciones
9 octubre de 2017En la festividad de Nuestra Señora del Rosario, el Seminario diocesano de Jaén acogía los actos de apertura del curso 2017-2018.
La mañana comenzaba con la celebración de una Eucaristía, presidida por Monseñor Amadeo Rodríguez Magro, y concelebrada por una veintena de sacerdotes diocesanos, entre ellos los formadores y profesores que preparan a los futuros sacerdotes. En la Santa Misa estuvieron presentes también, los seminaristas, representantes de la Universidad de Jaén, miembros de la curia, religiosas, y los familiares de los seminaristas, quienes también quisieron participar en esta apertura del curso.
Homilía
El Prelado del Santo Reino comenzó agradeciendo su presencia a todos los asistentes, para después poner de relieve el Rosario y la intercesión de María ante su Hijo, a través de la oración. «Ella intercede por nosotros y nos lleva a su Hijo». Para continuar explicando que «en el comienzo de curso estamos celebrando un proyecto de la Iglesia, en nombre del Señor, que acoge a aquellos que son llamados por Él, a aquellos que reciben el don de la llamada».
En este sentido, Don Amadeo expresó «La Iglesia que siempre ha estado muy preocupada por la formación de los seminaristas, para que un día puedan ser aquellos sacerdotes que necesita la Iglesia para su servicio a lo largo del mundo. Por eso, tenemos un nuevo proyecto, la nueva ratio, que tiene como objetivo ayudar y acompañaros a vosotros, los seminaristas».
Dirigiéndose de un modo especial a los seminaristas el Obispo les dijo, «no lo olvidéis, tenéis que estar activos. Tenéis que tener el corazón abierto, el corazón dócil a la acción del Espíritu Santo y a la acción de la Iglesia, a través de la cual se está manifestando siempre el Espíritu. Tenéis que descubrir quiénes sois y cómo sois; para que descubráis vuestras virtudes y vuestras dificultades, para que os consideréis unas vasijas de barro moldeables y estéis dispuestos a que vuestros profesores y formadores os vayan moldeando en un proyecto, que no es otro que Jesucristo».
Para terminar, Don Amadeo pidió invocar a la Santísima Virgen, para que «Ella sea intercesora de todo el Seminario, en este proyecto que todos vamos llevando hacia adelante».
Al concluir las palabras del Obispo, el sacerdote D. Jesús Ureña juró su cargo como nuevo profesor del Seminario.
Sesión de Apertura
Al finalizar la Santa Misa, y tras tomarse los seminaristas una foto de familia con el Obispo y los responsables del Seminario, los asistentes se dirigieron hasta el Salón de Actos donde tuvo lugar la sesión de apertura.
El Rector del Seminario, D. Juan Francisco Ortiz fue el encargado de dar la bienvenida y explicar los cambios que hay dentro del Plan de Estudios del Seminario, y que vienen marcados por la nueva Ratio Fundamentalis Institutionis Sacerdotalis, ‘El don de la vocación presbiterial’, que incorpora importante novedades en la formación de los seminarios y en la formación permanente de los sacerdotes, «como dos momentos en un mismo camino». Con tres itinerarios formativos, uno para cada etapa, y que se basan además de en la formación académica, en la dimensión humanas, espiritual y comunitaria de los seminaristas.
A continuación, el Vicerrector, D. Juan Carlos Córdoba, ofreció la Memoria del Curso 2016-2017 tanto del Seminario como del Centro diocesano de Formación Cristiana, ‘San Pedro Pascual’.
La Lección inaugural de este curso fue pronunciada por el sacerdote y párroco de Ntra. Sra. de los Ángeles, de Carchelejo ; Administrador Parroquial de Ntra. Sra. de los Remedios, de Cárchel, y Licenciado en Teología Histórico-Dogmática, D. Antonio Ramírez Pardo.
«Modus confidenti et examinandi poenitentem iaponensem suamet lingua iaponica» fue el título elegido para exponer, con maestría, las vicisitudes en la introducción de la religión católica en Japón, y en concreto, se detuvo en la figura del fraile extremeño, Fray Diego Collado O.P.
D. Antonio Ramírez Pardo expuso la idiosincrasia de Japón y cómo ésta había influido en la forma de acoger la Buena Nueva de Cristo. Explicando las dificultades con las que se encontró San Francisco Javier, sobre todo de carácter idiomático, y cómo había ido fraguando el catolicismo entre el pueblo nipón a través de la evangelización de los misioneros.
Al finalizar su ponencia, el Obispo de Jaén, inauguró oficialmente el curso en el Seminario.
Antes de concluir el acto, el recientemente estrenado Director del CEDIF ‘San Pedro Pascual’, Don Antonio Garrido de la Torre, llamaba al escenario a D. Julián Alcalde Liébana, para homenajearlo por su dedicación, como voluntario en las labores administrativas, durante más de 14 años en este Centro de Formación Cristiana. El Obispo, Don Amadeo, le hizo entrega de una placa como muestra de agradecimiento por su labor. Por su parte, D. Julián Alcalde quiso agradecer a la Iglesia de Jaén, en la persona de su Obispo estos años, y lo hizo con unas emotivas palabras.
Exposición
La intensa mañana concluyó con la visita e inauguración de ‘Enredados’: una exposición que durante todo este curso se pondrá visitar en las instalaciones del Seminario, y que forma parte de la campaña vocacional, ‘¡Visita nuestro Seminario y enrédate con nosotros!’.
Para finalizar, los asistentes tuvieron oportunidad de compartir un aperitivo.
Galería Fotográfica: «Inauguración curso 2017-2018 en el Seminario diocesano»