Carta Pastoral del Sr. Obispo: “Mi agradecimiento al arciprestazgo de la Sierra de Segura tras la visita pastoral”

4 julio de 2011

donramon     Muy queridos sacerdotes y fieles:
     1. Al terminar mi recorrido por las diecinueve parroquias del Arciprestazgo de Segura, además de los numerosos núcleos unidos a las comunidades parroquiales, he dado gracias a Dios por conoceros más de cerca y recorrer la incomparable geografía de esos valles y sierras. He compartido con vosotros unos días inolvidables y he aprendido también de vuestros valores y raíces cristianas tan profundas.
     Más de una vez he pensado, durante esos recorridos, en los primeros cristianos que se reunían junto a su Obispo en la llamada “statio”, en torno al único Altar de cada ciudad, para celebrar la Eucaristía y hacer presente la muerte y resurrección del Señor. Eran todos “uno”; se alimentaban de la doble Mesa de la Palabra y la Eucaristía; al final se despedían y el Obispo les enviaba a predicar el Evangelio y mostrar a los no creyentes “cómo se amaban y ayudaban a los demás”.
En la Misa que celebramos todos los sacerdotes del arciprestazgo con la comunidad parroquial de Segura, pudimos vivir esta misma gozosa verdad y experiencia.

     2. También quiero daros las gracias a cada uno de vosotros, especialmente a los sacerdotes, por tantas deferencias y atenciones para con mi persona como Obispo y Pastor de esta Iglesia de Jaén, a lo largo y ancho de esta Visita. Os confieso que he disfrutado mucho interiormente y hasta me he cansado, junto con vosotros, por el Evangelio. Nosotros sólo plantamos y regamos, es Dios quien da el incremento a nuestro esfuerzo. De Él es la iniciativa y para Él los frutos.
      Nunca ya os voy a olvidar en las celebraciones a la sombra de un nogal, de una higuera o de los olivos. Celebraciones ante una imagen, en los cementerios y antiguas escuelas. He visitado y orado ante el Sagrario de todos los templos y sus cuidadas Iglesias. Hemos rezado juntos ante vuestros Patronos desde la oración suprema de los cristianos: la Eucaristía.
      A tantas personas mayores y enfermas, a los niños y jóvenes con sus profesores y catequistas, a los ministros extraordinarios de la Eucaristía, monaguillos, coros parroquiales, cofradías y otras organizaciones… a los consejos pastorales y de economía parroquiales, a la organización de la caridad, a los jóvenes y adultos a quienes he podido administrar el Sacramento de la Confirmación y, sobre todo, a cuantos han rezado por los frutos de esta Visita Pastoral, mi saludo y agradecimiento. También para las autoridades civiles y medios de comunicación, siempre tan cercanos y atentos.
     3. A mi regreso afloran algunas preocupaciones que también os manifiesto. Ya las he puesto en las manos de la Santísima Virgen para lograr su intercesión.
     Preocupante el éxodo de jóvenes en demasiadas poblaciones y núcleos; precariedad en el trabajo para no pocos; cristianos alejados de su fe bautismal que precisan de nueva evangelización; la sequía de vocaciones para el sacerdocio, vida de consagración y, cada vez más, para constituir una familia cristiana; la escasa respuesta en general para reunirse la Comunidad en la Misa dominical; cierta falta de interés u organización para formarse mejor como cristianos; las excesivas obligaciones y kilómetros que recorren los sacerdotes en su mayoría para atender a los fieles encomendados… pero, junto a esta relación de propuestas, destacaría una lista mayor de riquezas y logros en todo el Arciprestazgo que hemos de defender e incrementar, como se está haciendo.
     No tengan reparo en abrirse a iniciativas comunes del Arciprestazgo, como “cristianos en la sierra” y diocesanas, como la próxima “Jornada mundial de la juventud”… Cuiden siempre con esmero poner la semilla del evangelio en las manos de cada bautizado en tiempo oportuno para que germine y no se pierda. No cesen en este empeño y háganlo siempre en el Nombre del Señor.
     Sepan que toda la Iglesia diocesana les acompaña y necesita, hasta el núcleo más pequeño.
     Seamos misioneros como Pablo, el Apóstol infatigable, y enamorados de Cristo, como él, guardemos el tesoro de nuestra fe, compartiéndolo con los demás.
     Con mi afecto en el Señor y bendición.
     +RAMÓN DEL HOYO LÓPEZ, OBISPO DE JAÉN

Compartir:

OTRAS NOTICIAS

Cartas Pastorales
Vigilia de las Espigas: «Torredelcampo será un altar para «el amor de los amores»

Vigilia de las Espigas: «Torredelcampo será un altar para «el amor de los amores»

Como cada año, celebramos la tradicional Vigilia de Espigas dedicada a la solemne adoración al Santísimo Sacramento. En esta ocasión tendrá lugar el próximo 15 de junio y nos congregaremos en Torredelcampo, donde sus calles y plazas se harán altar para recibir y adorar al Amor de los amores.
Carta Pastoral para el mes de mayo «Reina del cielo, alégrate»

Carta Pastoral para el mes de mayo «Reina del cielo, alégrate»

En este tiempo de Pascua, nos regocijamos con María por la resurrección de su Hijo Jesucristo, por la victoria sobre el pecado y la muerte. Como la Iglesia nos enseña, en lugar del Ángelus, en el tiempo de júbilo saludamos a María con la antífona del Regina Coeli: «Reina del Cielo, alégrate, aleluya.
Carta Pastoral Pascua 2024: «Triunfa la vida»

Carta Pastoral Pascua 2024: «Triunfa la vida»

Desde hace veinte siglos la Iglesia viene anunciando esta gran noticia: el mismo que expiró en la cruz, el que fue envuelto en lienzos y sepultado, cumplió su palabra: «Al tercer día resucitaré» (Mt 27,63). La muerte ha sido vencida y ha triunfado la vida. Su nueva vida ya no es vida terrena sino vida en plenitud, propia de Dios. Pero más allá de este hecho histórico, el triunfo de Cristo trasciende las leyes de la historia y es la parte central del mensaje cristiano.
Carta pastoral con motivo del Día del Seminario «Padre, envíanos pastores»

Carta pastoral con motivo del Día del Seminario «Padre, envíanos pastores»

Como cada año, la Iglesia celebra en torno a la fiesta de San José el Día del Seminario. Este año 2024 será entre los días 17 al 19 de marzo, con el lema «Padre, envíanos sacerdotes». Se trata de una ocasión propicia para que en todas las comunidades parroquiales intensifiquemos la oración por las vocaciones al sacerdocio, para que el Dueño de la mies envíe muchas y santas vocaciones que sean canales de la gracia y la misericordia del Señor para nuestra Diócesis.
© 2022 Diócesis de Jaén
Accesibilidad
logo