Vía Crucis Vocacional
16 abril de 2014 En este curso, la Iglesia Diocesana de Jaén nos anima a centrar los mejores esfuerzos en el trabajo referido a la Vocación Cristiana en toda su riqueza de ministerios y carismas. El Papa Francisco lo formulaba de forma directa en la pasada JMJ de Río con los siguientes términos: “A todos nos llama Dios, pero hay un camino para cada uno”.
Nuestra Iglesia diocesana de Jaén ora con especial insistencia por las vocaciones. La vocación es un misterio grande de fe. Es Dios Padre el que llama todas las cosas a la existencia, a toda criatura viviente a la vida, a todo ser espiritual al conocimiento y al amor que Él nos ofrece.
Dios, que llama a todos los hombres para dominar y completar la creación, llama a algunos, en especial, para que le sigan y sean obreros que trabajen su mies. Es el Espíritu del Padre y de Jesús el que continúa haciendo que se oigan en la intimidad de cada uno las llamadas más personales.
Jesús, cuando trató este tema con sus discípulos, tuvo la audacia de decirles: “Orad al dueño de la mies que envíe obreros a su mies” (Lc 10,2). Oremos pues juntos por las vocaciones, especialmente en nuestra diócesis de Jaén.
Os proponemos reflexionar desde la perspectiva vocacional el camino de Cristo hacia la cruz.