Protocolo de Catequesis durante la pandemia
14 septiembre de 2020Catequesis parroquial durante la Pandemia
Se necesita afrontar la nueva situación en la que nos obliga a vivir el riesgo de contagio del Covid-19 en todos los órdenes de nuestra vida, incluida la catequesis. La llamada “nueva normalidad” obliga a las parroquias a encontrar formas y métodos adecuados a esta situación para continuar con la acción catequética y la transmisión de la fe, sobre todo a los niños y adolescentes que necesitan completar su iniciación cristiana.
Para ello, desde la Delegación Episcopal de Catequesis, se proponen las siguientes medidas y ofrece el siguiente protocolo de actuación.
MEDIDAS DE ACTUACIÓN CONTRA LA COVID-19
MEDIDAS GENERALES PREVENTIVAS
Catequistas, catecúmenos y padres de la parroquia deberían conocer las medidas generales establecidas para la COVID-19 y estar atentos a las posibles novedades que presenten las autoridades sanitarias.
Entre las medidas ahora importantes se encuentran:
- El uso obligatorio de mascarilla.
- La higiene frecuente de las manos es la medida principal de prevención y control de la infección.
- Cubrirse la nariz y la boca con un pañuelo al toser y estornudar, y desecharlo a un cubo de basura con bolsa interior. Si no se dispone de pañuelos emplear la parte interna del codo para no contaminar las manos.
- Evitar tocarse los ojos, la nariz o la boca, con las manos, ya que éstas facilitan su transmisión.
- Mantener un distanciamiento físico de 1,5 metros, y cuando no se pueda garantizar se utilizarán medidas de protección
adecuadas.
MEDIDAS ESPECÍFICAS PARA LA CATEQUESIS
- Cada catequista dispondrá de geles hidroalcohólicos en su sala de catequesis y se asegurará que los usen cada vez que entren o salgan de la misma.
- Para los niños y niñas más pequeños que se metan las manos frecuentemente en la boca, no se recomienda el uso de geles hidroalcohólicos, sino el lavado de manos (con agua y jabón).
- Se tendrá precaución de no dejar los geles accesibles y sin supervisión.
- La utilización de la mascarilla será obligatoria en todo momento dentro de las dependencias parroquiales. Están dispensado de esta obligatoriedad aquellos catecúmenos con algún problema de salud acreditado que lo desaconseje o alguna necesidad de apoyo educativo reconocida que pueda interferir en su uso, o que, por su situación de discapacidad o dependencia, no dispongan de autonomía para quitarse la mascarilla, o bien presenten alteraciones de conducta que hagan inviable su utilización siendo recomendable en estos casos otras medidas compensatorias.
- Cada catecúmeno traerá su material y no podrá compartirlo con los demás.
- En la organización de la sala de catequesis se procurará la mayor distancia posible entre las mesas y no se permitirá
levantarse sin razón justificada. - No estará permitido comer dentro de las instalaciones.
- Se establecerá un horario de entradas y salidas para la catequesis que evite aglomeraciones.
- Solo se hará uso del servicio en casos imprescindibles, y se asegurará su limpieza después de usarlo.
PROTOCOLO DE CATEQUESIS
PREPARACIÓN
- Preparar adecuadamente la inscripción a la catequesis. Habría que ofrecer una ficha o formulario online que siguiera la ley de protección de datos y en el que aparecieran especialmente datos relativos al correo electrónico y al número de teléfono móvil y WhatsApp. De esta manera se podrán asegurar el contacto y la comunicación permanente entre la parroquia y las casas, así como el envío y la recepción de los materiales catequéticos adecuados en cada momento.
- Buscar y formar nuevos catequistas parroquiales. Hay que asegurar un desdoblamiento de los grupos catequesis en grupos más pequeños y adaptados a las dependencias parroquiales. Además, servirán para apoyar y en algunos casos substituir a los catequistas que por su edad o por enfermedad pertenezcan al colectivo considerado de alto riesgo. Se trata de una gran oportunidad para aumentar el número de catequistas,
sobre todo entre aquellos padres y madres de los niños de catequesis que puedan estar más comprometido con la Iglesia y sean conscientes de la importancia de la transmisión de la fe. Los nuevos catequistas recibirán una formación básica por parte de la Delegación de Catequesis. - Organizar y distribuir cuidadosamente los grupos de catequesis. El propósito debe ser crear grupos pequeños entre 6 y 8 niños por grupo, y no más.
- Programar detenidamente la catequesis y el calendario de asistencias de los diversos grupos a la Eucaristía parroquial y a otras celebraciones. Es fundamental evitar aglomeraciones.
- Fechar de manera provisional la celebración de los sacramentos de los niños de catequesis, sabiendo que los días fijados se encuentran sujetos a variaciones según las circunstancias.
- Desinfectar y preparar las instalaciones. Cuidar las instalaciones donde van a tener lugar las catequesis, siguiendo siempre las medidas de sanitarias establecidas, y preparar nuevos espacios. Habría que tener bien señalizadas las medidas de seguridad, preparar las estancias para mantener siempre la distancia de seguridad y tener previsto la manera de desinfectar los salones parroquiales después de cada sesión catequética.
- Preparar en nuevas tecnologías y adecuar las instalaciones. Hay que tener los centros parroquiales preparados de WIFI y, en la medida de los posible, de dispositivos que permitan el manejo de las nuevas tecnologías. Para una utilización básica de las mismas deberían prepararse
a los catequistas. - Realizar reuniones de inicio de curso con padres y catequistas para explicar la nueva situación y cómo se va a desarrollar la catequesis en la parroquia.
- Tener previsto recursos on-line. La utilización de las nuevas tecnologías y los recursos que ellas ofrecen deben formar parte de la metodología habitual del desarrollo de la catequesis, pero sobre todo cuando existe la posibilidad de confinamiento. Ellos pueden ser fundamentales para las catequesis en el hogar.
COMIENZO Y DESARROLLO
- Todos los catecúmenos deben haber adquirido el material necesario para la catequesis. Aprovechamos para recordar los catecismos aprobados por la Conferencia Episcopal Española con los que se debe trabajar en nuestra diócesis:
- Para el despertar religioso: Mi encuentro con el Señor.
- Para la etapa de Primera Comunión: Jesús es el Señor.
- Para la etapa de Confirmación: Testigos del Señor.
- Se recomienda que el despertar religioso se haga a través de la catequesis familiar. Deberían ser los padres quienes se ocupasen principalmente del despertar religioso de sus hijos, ayudados por unas reuniones mensuales en la parroquia donde recibirían formación y acompañamiento.
- Para la etapa de la iniciación cristiana como preparación para recibir el Sacramento de la Eucaristía, se tiene que cuidar la catequesis presencial y, sobre todo, la asistencia a las celebraciones de la eucaristía de los niños que se encuentran en el último curso. Estos podrían recibir una formación complementaria en el mismo templo parroquial, antes o después de cada celebración. En esta etapa debería estudiarse
la posibilidad de una mayor implicación de la familia. - Para la etapa de iniciación cristiana como preparación para el Sacramento de la Confirmación, sin dejar las catequesis presenciales, se podrían mantener también unas catequesis semipresenciales, en las que se utilizaran las nuevas tecnologías. Estos catecúmenos disponen de más medios y mayor sentido de la responsabilidad para responder a las exigencias que se les haga. A ellos también se les puede hacer llegar un breve mensaje diario con alguna cita bíblica, el pensamiento de algún santo, etc.
POSIBLE CONFINAMIENTO
- En la actual situación de pandemia, no se puede olvidar que el riesgo de confinamiento es probable. Por eso, hay que tener previsto cómo seguir el proceso catequético en este caso.
- Establecer desde el principio los contenidos catequéticos mínimos sobre los que se debería trabajar. Y no pretender cumplir con el programa catequético íntegro de otros años.
- Usar las nuevas tecnologías para que los catequistas puedan continuar algún tipo de catequesis on-line.
- Estar atento a las herramientas y recursos interactivos que ofrece la Delegación de Catequesis para poder continuar una catequesis no presencial.
Delegación Episcopal de Catequesis