Los seminaristas ofrecen sus testimonios vocacionales en las Parroquias de la ciudad de Jaén
14 marzo de 2016Este domingo, el más cercano a la festividad de San José, se ha celebrado el Día del Seminario, bajo el lema, “Enviados a reconciliar”. Una jornada que ha pretendido, como cada año, poner de manifiesto, la necesidad de nuevas vocaciones a la vida sacerdotal.
Con este motivo, los seminaristas mayores, que están formándose en el Seminario Diocesano de Jaén, ha participado este domingo en distintas misas por las parroquias de la ciudad, para dar con su testimonio de fe, compromiso y vocación un ejemplo de vida dedicada al sacerdocio. Jóvenes a los que Dios ha llamado para ser “obreros en su mies”, y que con sus palabras, en las distintas parroquias han mostrado como Dios sigue llamando a la vocación sacerdotal.
Como recoge la Carta Pastoral remitida por el señor Obispo de nuestra Diócesis con motivo del Día del Seminario, “La presencia de vocaciones sacerdotales es un signo seguro de verdad y vitalidad de una comunidad cristiana”, y añade “Sabemos que las vocaciones para el sacerdocio tenemos que pedirlas insistentemente ante el Dueño de la Mies. Dios es quien llama, pero también debemos buscarlas, cuidarlas y apoyarlas. Un jardín no florece si no se cultiva y cuida con esfuerzo y constante vigilancia”.
Entre las parroquias que han visitado, la de San Miguel, en la que los seminaristas Pepe y Antonio han participado en la Eucaristía y han ofrecido su testimonio vocacional en el Día del Seminario.
Galería fotográfica «Testimonios Seminaristas en la Parroquia de San Miguel»