La iniciación cristiana centra la reflexión de Vicarios y Arciprestes de la Provincia Eclesiástica
9 febrero de 2015 El Seminario de Málaga ha acogido las XX Jornadas de Arciprestes y Vicarios de la Provincia Eclesiástica de Granada. El tema a tratar ha sido la instrucción pastoral de los obispos andaluces sobre la iniciación cristiana «Renacidos del Agua y del Espíritu» y han congregado a un buen número de sacerdotes de las diócesis de la Provincia Eclesiástica de Granada, que comprende las Diócesis de Cartagena, Almería, Jaén, Málaga, Guadix y la Archidiócesis de Granada.
La primera ponencia corrió a cargo del Sr. Arzobispo de Granada, D. Francisco Javier Martínez, con el título «La extrañeza de lo sacramental y algunas otras reflexiones marginales a la iniciación cristina». D. Ramón Navarro Gómez, Sacerdote de la Diócesis de Cartagena, profesor en la Universidad Católica San Antonio (UCAM) y en el Centro Universitario de Murcia (ISEM) invitó a la reflexión y diálogo con su ponencia «La celebración de los sacramentos de iniciación: La Confirmación».
La segunda jornada del encuentro de arciprestes y vicarios de la Provincia Eclesiástica de Granada comenzó con la ponencia del deán de la Catedral de Málaga, D. Alfonso Fernández-Casamayor con el título: «La Eucaristía, culminación de la iniciación cristiana». Tras la conferencia, los participantes realizaron un recorrido para conocer las nuevas instalaciones de la Casa Diocesana recientemente rehabilitadas.
Por la tarde, la reflexión continuó de la mano del Sr. Obispo de Almería, Adolfo González, con la ponencia que lleva como título «Principios teológicos y pastorales de la iniciación cristiana».
Para finalizar las jornadas tuvo lugar la clausura, con la ponencia del cardenal Mons. Fernando Sebastián, Arzobispo Emérito de Pamplona, con el título «La evangelización desde el contexto actual».
Estas Jornadas de Arciprestes y Vicarios de la Provincia Eclesiástica de Granada, en las que han participado varios sacerdotes de nuestra diócesis de Jaén, se celebran todos los años en el mes de febrero y sirven para establecer pautas para una pastoral de conjunto entre las diócesis cercanas y para compartir experiencias. También son una oportunidad excelente para la formación de los sacerdotes.