La Diócesis de Jaén se prepara para la «Visita ad Limina»
24 septiembre de 2013 La Nunciatura Apostólica en España ha comunicado a la Conferencia Episcopal Española (CEE) que se reanudarán las Visitas ad Limina Apostolorum, interrumpidas con motivo del Año de la Fe y que la Visita por parte de los obispos españoles está fijada para los días 24 de febrero al 8 de marzo.
El Papa Francisco recibirá a los obispos en grupos de 7 u 8. Cada obispo presentará brevemente un informe sobre el estado de la diócesis, respondiendo a las preguntas que el Santo Padre pudiera formularle. Además del encuentro con el Papa, que constituye el momento central de la Visita, los obispos deberán entrevistarse también con los diversos Dicasterios de la Curia Romana. Estos encuentros serán organizados por la Congregación para los Obispos, en coordinación con la CEE.
Cada obispo debe enviar a la Nunciatura el informe sobre el estado de la diócesis. Una vez leídos por la Congregación para los Obispos, estos informes son referidos al Papa.
Para la redacción de este informe referido a la diócesis de Jaén se ha mantenido recientemente una reunión presidida por el Sr. Obispo, D. Ramón de Hoyo, con los delegados episcopales. También participaron en esta reunión el Vicario General y de Pastoral y el Canciller del Obispado. En esta reunión se fueron perfilando los contenidos de las distintas áreas de la pastoral diocesana para que se aporte la mayor y más precisa cantidad de información con el objetivo de que cada delegado envíe un resumen de las actividades de su delegación y que una secretaría técnica vaya elaborando el informe definitivo.
Origen y objetivos de la Visita ad Limina
Los orígenes históricos de la Visita ad Limina datan del siglo IV, aunque fue el Papa Sixto V en 1585 quien la institucionalizó y dispuso de modo más sistemático. En la actualidad, la Visita ad Limina se define y precisa en los cánones 399 y 400 del Código de Derecho Canónico. Según esta legislación de la Iglesia, los Obispos diocesanos deben visitar las tumbas de los Apóstoles, encontrarse con el Sucesor de Pedro y presentar un informe o relación de sus respectivas diócesis cada cinco años, aproximadamente.
Su significado es el de visibilizar la unidad y la comunión de los sucesores de los Apóstoles con el sucesor de San Pedro y de las Iglesias locales con la Iglesia primada de Roma. De este modo, la Visita ad Limina es una ocasión para la comunión eclesial, la colegialidad episcopal y la caridad fraterna entre los Pastores y el Papa.