Funeral-homenaje ante las últimas tragedias en el mar Mediterráneo
27 abril de 2015 Ante las últimas tragedias de muertes de cientos de inmigrantes en el mar Mediterráneo, y en solidaridad con el sentir del papa Francisco, de los obispos españoles y de millones de hombres y mujeres, desde el Secretariado de Migraciones y unidos a toda la diócesis de Jaén proponen un gesto sencillo y a la vez profundo: un funeral-homenaje el 29 de abril, miércoles, en la plaza de Sta. María de Jaén, unidos a diferentes confesiones religiosas y personas migrantes, acompañados en representación de nuestro Obispo por el Vicario General.
En un manifiesto denominado «No podemos ni debemos seguir callados», el Secretariado de Migraciones de la diócesis de Jaén afirma: «Resuenan aún los ecos de las palabras pronunciadas el pasado mes de noviembre por el papa Francisco ante el Parlamento Europeo: “No se puede tolerar que el Mediterráneo se convierta en un gran cementerio”. Pero las noticias desgraciadamente lo confirman: más de 700 muertos entre Libia y Malta el pasado domingo 19 de abril; pocos días antes, otros 400; y así un trágico y continuo goteo, que alcanza la cifra de al menos 25.000 ahogados en el Mediterráneo desde el año 2000. A este drama se une otro no menos grave: el de las víctimas producidas por conflictos y guerras en diferentes lugares del mundo, víctimas con frecuencia por su condición de cristianas.
Si no somos capaces de sentir la tragedia, tenemos un problema en la mirada o en el corazón. Desde las orillas seguimos en silencio vergonzoso, pues estas tragedias no levantan olas de protesta e indignación para gritar con solidaridad hacia las víctimas:¡ BASTA YA!
Sí que hemos escuchado al Papa que con estas palabras mostraba su pesar el domingo pasado “Son hombres y mujeres como nosotros, hermanos nuestros que buscan una vida mejor, hambrientos, perseguidos, explotados, víctimas de guerras, buscan unan vida mejor… Buscaban la felicidad”.. También los obispos españoles reflexionaron sobre esta realidad el lunes 20, y guardaron un minuto de silencio al comenzar su Asamblea plenaria.
Nosotros, hoy, cristianos de Jaén, nos unimos al sentir y a la oración de toda la Iglesia en favor de nuestros hermanos muertos y desaparecidos. No podemos callarnos ni mirar para otro lado: son muertes evitables. Deben sacudir nuestra conciencia, y la de nuestros gobernantes europeos y los organismos internacionales. Tenemos que actuar con decisión para evitar que estas tragedias se repitan. Y esto de tres formas:
Abriendo vías legales para que las personas puedan llegar a Europa, y no estén a merced de mafias, abusos y explotación. Cambiando radicalmente la política europea en materia de migración que, en lugar de controles y vigilancia de fronteras, priorice la protección de la vida y los derechos humanos de las personas migrantes, garantizado realmente el derecho de asilo. Actuando en el origen de los conflictos que provocan estos éxodos masivos de refugiados, favoreciendo la paz, la estabilidad y el desarrollo humano.
Desde la comunidad cristiana nos ofrecemos a colaborar en las iniciativas que la sociedad y las autoridades lleven a cabo para acabar con estas situaciones (…)».