El Sr. Obispo inaugura el Año de Vida Consagrada
2 diciembre de 2014 Dicha Eucaristía comenzaba a las 12 horas, en la Catedral de Jaén, y estuvo concelebrada por varios sacerdotes y religiosos diocesanos.
Durante su homilía el Sr. Obispo afirmaba que “éste es el pórtico que nos presenta la Iglesia en el inicio del Adviento: Orar para que el Señor continúe viniendo con sus gracias y bendiciones a este mundo y a nuestra vida; permanecer siempre vigilantes y llenos de esperanza, pues Él es fiel y nunca dejará solos a quienes le invocan; mantenernos firmes hasta el final como creyentes y llenar nuestras manos de buenas obras”.
“En la Carta que he enviado a las parroquias de la Diócesis les digo que la riqueza de la vida consagrada pertenece a toda la Iglesia y que, durante los próximos meses deberíamos conocer, en primer lugar, y apoyar, después, esta rica realidad. Tengamos todos muy presente que la sementera del Evangelio sigue llegando a muchos niños y jóvenes a través de las manos consagradas y que la Iglesia diocesana está permanentemente apoyada ante el Señor gracias a los consagrados, de los monasterios de clausura y de vida contemplativa”, continuaba.
Asimismo, el Sr. Obispo pedía por las vocaciones. “Agradecemos, ya desde esta Eucaristía, estos dones que el Señor regala a la Diócesis “en” y “por” los consagrados y roguemos al Dueño de la mies que conceda nuevas vocaciones para la vida de consagración, jóvenes capaces de entregar su vida por entero a Dios y a su Iglesia” .