El profesorado de Religión Católica clausura el Curso Académico 2015-2016

El pasado sábado, día 4 de junio, nos encontramos en el Seminario diocesano de Jaén el profesorado de la escuela concertada y de Religión Católica, convocados por la Delegación Episcopal de Enseñanza para clausurar el curso académico 2015-2016.

Comenzamos la Jornada a las 10h con la celebración de la Eucaristía presidida por nuestro nuevo Obispo D. Amadeo, quien en todo momento se mostró con gran sencillez y cariño hacia quienes tenemos la hermosa y, al mismo tiempo, ardua tarea de educar a los niños, adolescentes y jóvenes, con un talante, al estilo de Cristo Jesús, quien en todo momento muestra el rostro misericordioso a quienes están necesitados del cariño, la comprensión y del amor. En la homilía nuestro Pastor nos habló de las dificultades de esta tarea, que no son diferentes a las que tienen también el resto de compañeros de claustro, en unos momentos difíciles para la educación pero muy esperanzadores. Lo nuestro es sembrar, nos dijo Don Amadeo con alegría. Nos invitó a disfrutar de la jornada festiva, dejando a un lado las experiencias dolorosas que durante el curso  haya habido.

Una vez terminada la Eucaristía, organizada de forma excelente por el grupo de profesores de Linares, pasamos al Salón de Actos para la mesa Redonda: “La Misericordia de Dios y el Amor al Prójimo”, compuesta por la hermana Yolanda Romero, Sierva de los Pobres, Hija del Sagrado Corazón de Jesús; Francisco Oya Delgado, responsable del Programa Diocesano, Reclusos e inserción socio-laboral “Nazaret”; José Luis Cejudo, Delegado Episcopal de Pastoral Penitenciaria; Inmaculada Sánchez Pereira, miembro del COF y del Proyecto Raquel; Inmaculada Martínez, terapeuta y Coach personal, familiar y de pareja, que ejerce en su Centro de Crecimiento Personal y Familiar. Cada uno de ellos nos fueron mostrando cómo en su vida personal y profesional la Misericordia de Dios ha estado presente en todo momento. Sin duda, nos sobrecogieron con su testimonio personal, y muchas de sus palabras calaron muy hondo en nuestro corazón, pudiendo afirmar que todos los asistentes nos llenamos de la Misericordia de Dios escuchándoles. Fuimos testigos de todo lo que falta por hacer en nuestra sociedad, pero, al mismo tiempo, descubrimos cuánto se está trabajando también y muy bien, desde nuestra debilidad y limitación, pero siempre asistidos por la Gracia de Dios. Entre las frases dignas de mención, de lo mucho que compartieron, recogemos algunas como “La Misericordia se aprende…”, “Lo importante, más que enseñar es acompañar y crear espacios para encontrarnos, pues en lo más profundo de cada uno, todos necesitamos lo mismo…”, “Lo importante es saberse querido, pues si lo tienes todo, pero no te sientes querido, no tienes nada”, “Ahora que has experimentado cuánto te quiero ve y díselo a los demás”, “Somos privilegiados por ser instrumentos de Dios para sanar los corazones de mujeres que han abortado”, “Antes de programar, acercarnos para abrir el corazón del que sufre, para sentir su dolor”, “Es muy duro escuchar de una persona privada de libertad que su nombre nunca va a sonar por megafonía porque nadie se acuerda de escribrirle”…éstas son algunas de las palabras que, con gozo y en ocasiones con dolor, nos expusieron e hicieron que nos estremeciéramos al escucharlas. Desde estas líneas dar las gracias por vuestro rico testimonio y por la labor tan llena de Misericordia que estáis realizando.

Después de entregarles un pequeño obsequio a cada uno de los integrantes de la mesa redonda, por nuestra Delegada Dª Celedonia Ortega Raya, se proyectó un montaje audiovisual “La Misericordia en el aula”, muy bien realizado por nuestro compañero José Manuel Ureña, con el material que algunos profesores han enviado a la Delegación sobre actividades realizadas durante este curso con el alumnado. La mayoría de las acciones han sido la visita a residencia de ancianos, y es conmovedor ver a nuestros mayores con el rostro de felicidad cuando los más pequeños les están cantando y obsequiando con algún detalle que les hace sentirse importantes, pues realmente lo son, porque a ellos les debemos lo que somos y tenemos.

Terminamos la jornada con un pequeño homenaje a dos compañeras que se han jubilado en este curso; Dñª Rosario Gutíerrez Morales y Dñª Mª Eugenia García Díaz.

Después de  algunas orientaciones e informaciones generales por parte de Dª Cele, compartimos un exquisito aperitivo preparado con cariño por nuestras hermanas Mercedarias en las galerías del Seminario. Todos felices y llenos de la Misericordia de Dios volvimos a nuestras casas con un nuevo impulso para seguir sembrando el Amor misericordioso de Dios allí donde la Iglesia nos ha enviado, en el aula, en el centro educativo.

Mª del Carmen Ropa González. Profesora de Religión Católica

Galería fotográfica «Clausura Curso Académico 2015-2016 Profesores de Religión»