El Obispo preside la Eucaristía de Acción de Gracias por el 25 aniversario de la Asociación Síndrome de Down
5 diciembre de 2016“El tiempo de Adviento, como tiempo fuerte, es un tiempo de cambio, de conversión. En esta celebración nos abrimos a la Palabra de Dios que hoy nos invita a volver a su «proyecto original» y nos interpela a reorientar nuestros sus valores, actitudes a fin que se traduzcan en acciones concretas. Además, celebramos en esta Eucaristía los 25 años de andadura de la Asociación Síndrome de Down de Jaén y provincia, que se ha esforzado por ofrecer y construir un proyecto de vida para las personas con Síndrome de Down, otras discapacidades y sus familias”. Con estas palabras comenzaba la Eucaristía de Acción de Gracias por el 25 aniversario de la Asociación Síndrome de Down, que se celebraba el pasado domingo, 4 de diciembre, en la Catedral de la capital.
Dicha Eucaristía, que comenzaba a las 12 horas, estuvo presidida por el Obispo, Don Amadeo Rodríguez Magro, y concelebrada por el Vicario General, D. Francisco Juan Martínez Rojas.
Estuvieron presentes, además, la Presidenta y otros miembros de la Asociación, una veintena de niños y jóvenes con Síndrome de Down, así como un gran número de familiares y amigos.
Durante su homilía el Sr. Obispo quiso hacer hincapié en los 25 años de la Asociación. “Hoy ha venido un grupo muy entrañable para la sociedad y para la Iglesia. Están con nosotros la Asociación Síndrome de Down que cumple 25 años. 25 años de vida que significan 25 años de dignidad, 25 años de reconocimiento de ese valor entrañable que tiene todo ser humano, y que, de un modo muy especial, tenéis vosotros, chicos y chicas”.
“Queridos niños y niñas, chicos y chicas, quiero que os consideréis una parte muy importante de la Iglesia. Que queráis mucho a la Iglesia del Señor, porque tenéis fe. La fe que habéis recibido en vuestro bautismo, la fe que habéis alimentado en vuestra familia, la fe que habéis ido cultivando poco a poco cuando habéis recibido los sacramentos. Quiero que os consideréis siempre de la Iglesia, su corazón. Creo que nuestro Padre, Dios, y Jesucristo, vuestro amigo, ha puesto en vuestra vida mucho bien”, continuaba Monseñor Rodríguez Magro.
Finalmente, el Obispo quiso dirigirse a los familiares. “Poned al servicio del mundo y de los demás, lo que hacéis a favor de vuestros hijos. Que ellos sean para vosotros y para todos nosotros una lección permanente de servicio, de entrega y de generosidad a los demás. Que ese sacrificio precioso y en muchas ocasiones, por su amor, gratificado, nos ayude a todos nosotros a ser como Cristo, a sentir como Cristo y a ser servidores los unos de los otros. Esa es la gran lección que hoy se nos pide para que preparemos adecuadamente nuestro corazón para el nacimiento de nuestro Señor Jesucristo”.
Por su parte, la presidenta, Mª Dolores Gómez, quiso dar las gracias al Señor “por esta celebración de la Eucaristía, en la que a través de tu palabra nos has invitado a la conversión. Señor, tú pan nos alimenta y renueva. Danos fuerza para seguir firmes y llenos de ilusión, construyendo el reino por medio de proyectos de vida digna para todas las personas con Síndrome de Down y otras discapacidades. Gracias Señor por tantas y tantas personas que, a lo largo de estos 25 años de historia de la asociación, han dado testimonio de su fe y ahora gozan ya de su presencia”.
Tras la Eucaristía, Don Amadeo recibió, de manos de la Presidenta, la insignia de la Asociación Síndrome de Down. Asimismo, pudo saludar y conversar con los chicos y sus familias.