El Obispo conoce, de la mano del Cardenal Semeraro, cómo se encuentra el proceso martirial de Jaén
18 octubre de 2022Esta mañana, el Obispo de Jaén, Don Sebastián Chico Martínez, ha acudido al Dicasterio para la Causa de los Santos, en la Ciudad del Vaticano, acompañado por el Delegado de Patrimonio y Deán de las Catedrales, D. Francisco Juan Martínez Rojas.
Allí, han sido recibido por el perfecto, el Cardenal Marcello Semeraro, para conocer de primera mano, cómo se encuentra el proceso de la causa de beatificación de Manuel Izquierdo Izquierdo y 129 compañeros, que se abría en Jaén en abril de 2016 y que tras culminar el proceso diocesano, las 20 cajas con los más de 30.000 documentos aterrizaban en Roma en julio de 2019.
La reunión, que se ha desarrollado en un tono cordial y cercano, el Prelado jiennense ha podido conocer de forma fehaciente en qué punto se encuentra este largo proceso.
Un grupo de los posibles mártires ya han pasado por la comisión histórica y otros tantos están a la espera de este primer proceso vaticano.
Don Sebastián, de peregrinación diocesana en Roma estos días, había concertado, a través del postulador romano de la causa de nuestros mártires, Nicola Gori, una audiencia con el cardenal prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, Marcello Semeraro. En el curso de la audiencia, Don Sebastián le ha pedido al prefecto que el primer grupo de mártires, que ya ha recibido el visto bueno de la comisión histórica, pase a la comisión de teólogos, y que el segundo grupo pueda ser examinado pronto por la comisión histórica. Cuando ambos grupos de mártires pasen por las tres comisiones -histórica, teólogos y cardenales-, si no hay objeción alguna, recibirán la aprobación del Papa en un consistorio público, y se fijará la fecha de la beatificación. Aunque el grupo es sólo uno, ha sido dividido en dos para facilitar el trabajo de la congregación. Por eso, sólo habrá una ceremonia de beatificación, no dos.
Los posibles mártires, al haber sido muertos en defensa de la fe incluyen: 127 hombres y a 3 mujeres. 109 sacerdotes que fueron asesinados en la diócesis; 17 seglares varones, muchos de Acción Católica o Adoración Nocturna; un matrimonio; una religiosa de clausura; una viuda y un sacristán con discapacidad intelectual.
Es ahora Roma la que tiene que finalizar las distintas fases de este proceso de beatificación que declararía mártires a estos hombres y mujeres que murieron confesando su fe.