Dos de cada tres alumnos eligen cursar voluntariamente religión católica
20 marzo de 2015 La Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis de la Conferencia Episcopal Española ha elaborado el informe anual sobre el número de alumnos que reciben formación religiosa y moral en la escuela. En la actualidad, dos de cada tres alumnos eligen cursar voluntariamente religión católica. Con respecto al año pasado, las cifras suben un 1,5% en los centros de “iniciativa social-entidad titular católica” y un 1,6% en los de “iniciativa social-entidad titular civil”, mientras que bajan un 1,8 % en los centros estatales.
Según los datos recabados, proporcionados por 61 diócesis de las 69 existentes en España, de un total de 5.385.601 de alumnos escolarizados, 3.501.555 reciben actualmente enseñanza religiosa católica, lo que supone el 65% (un 1,7% menos que el curso pasado). “Esta disminución del número de alumnos se debe, entre otros motivos, a las dificultades y trabas de tipo social, legislativo y administrativo que se ponen a la enseñanza religiosa”.
Por otra parte, los obispos de la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis han publicado una Nota dirigida a toda la comunidad católica para recordar “el papel significativo de la enseñanza escolar de la religión católica”, que es, ante todo, un ejercicio de la libertad religiosa y del derecho a la educación de los hijos por parte de los padres, según sus propias convicciones religiosas y morales.
Mirando al futuro, los obispos afirman que “la LOMCE mejora la situación de la enseñanza religiosa escolar en las etapas de Educación Primaria y Educación Secundaria. Sin embargo, su regulación en Bachillerato no garantiza la oferta obligatoria de la asignatura por parte de los centros ni, consecuentemente, que los padres y, en su caso, los alumnos puedan optar por ella”.
Los obispos piden una vez más “que la enseñanza religiosa, como derecho fundamental de los padres y de los alumnos, sea una asignatura equiparable a las fundamentales, de oferta obligatoria para los centros y voluntaria para los alumnos, y que el hecho de recibir o no recibir esta enseñanza no suponga discriminación académica alguna en la actividad escolar”.
Concluyen la Nota agradeciendo a los padres de los alumnos en edad escolar “el ejercicio libre y responsable del derecho que año tras año muestran a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que responda a sus convicciones”.