Cáritas invita a sus agentes a ser «servidores de los últimos» ante el reto de un nuevo curso
24 septiembre de 2024La parroquia de la Inmaculada Concepción de La Carolina acogió este año la inauguración oficial del curso de Cáritas Diocesana de Jaén. Más de medio centenar de agentes participaron este lunes en una eucaristía presidida por el vicario de Caridad y delegado de Cáritas Diocesana de Jaén, Juan Raya, quien estuvo acompañado por el párroco in solidum de la Inmaculada Concepción, Jesús Ureña, y por el diácono Francisco Esteban Hernández. En la celebración estuvo presente la memoria de las personas voluntarias fallecidas a lo largo del curso anterior. En especial, de Miguel Quero, que murió el pasado mes de julio y que contaba con una larga trayectoria como voluntario en La Carolina, donde fue coordinador de Cáritas Interparroquial hasta poco antes de su fallecimiento.
En la homilía, el vicario de Caridad invitó a los presentes a reflexionar sobre a qué dedican su tiempo. «Cuando el Señor les habla a los apóstoles de la cruz, estos están debatiendo sobre honores. Sin embargo, Él nos dice que el que quiera ser importante, que sea servidor de los últimos. Un término que utilizamos en Cáritas con tanta frecuencia», señaló el delegado episcopal y añadió: «El Señor nos pone el foco en el servicio a los demás como uno de los núcleos fundamentales de nuestro ser, de nuestra fe, de nuestra vida. Si por algo tenemos que distinguirnos no es por nuestros títulos o por los puestos que ocupamos, sino por nuestra capacidad de servicio a los demás».
El rostro visible de Jesucristo
Apoyándose en el texto evangélico, explicó que para la cultura judía los niños eran los últimos de la casa, no se les pedía opinión y su cometido era solo obedecer. «En nuestro caso, esos niños representan a la gente con la que trabajamos. A la gente de Santa Clara o del centro de día, de Besana, de la casa hogar de Andújar o de las Cáritas parroquiales. A ellos representa este niño del que nos habla el Evangelio. Ellos son los que tienen que estar en el centro de nuestra conversación, en el centro de nuestro debate. Cuando los acogemos a ellos, acogemos al Señor. Ellos son el rostro visible de Jesucristo», manifestó en la homilía. «Hoy pedimos al Señor que renueve nuestro compromiso de fidelidad a estos últimos. Que todo lo que hagamos en Cáritas aumente nuestra capacidad de servicio. Por eso hoy le pedimos al Señor que nos dé las fuerzas necesarias, que siempre estemos dispuestos a atender las necesidades de los demás, tanto de los últimos como de los hermanos con los que compartimos nuestro trabajo», concluyó Juan Raya.
Por su parte, el director de Cáritas Diocesana de Jaén, Rafael Ramos, tomó la palabra en la acción de gracias. Dedicó el comienzo de su intervención al recientemente fallecido Miguel Quero. «Él tenía una gran sensibilidad con las personas que tenía a su alrededor, en especial con los más vulnerables, esencia de nuestra acción social en Cáritas; sin horarios, sin horas, sin límites… Siempre pensando en hacer nuestras acciones nuevas», afirmó. Ramos continuó su intervención instando a los presentes a «no perderse en guerras internas», sino a sembrar la concordia y la caridad universal.
Cáritas diocesana de Jaén