Encuentro diocesano de adolescentes Kairós
9 noviembre de 2016“La alegría de vivir con Dios” es el lema bajo el cual se ha celebrado este año el IV Encuentro Diocesano de Adolescentes Kairós . Participaron unos 262 adolescentes y 54 acompañantes procedentes de todos los rincones de la Diócesis. El encuentro comenzó con la acogida que tuvo lugar en el colegio Divino Maestro de Jaén –cedido por las Misioneras del Divino Maestro, como siempre con total disponibilidad y generosidad. Después de la acogida y unas palabras de bienvenida tuvo lugar la celebración de un taller.
El principal objetivo del taller era que los adolescentes Kairós pudieran conocer la importancia que tiene la fe, la confianza en Dios en la vida de todo cristiano. Utilizando diferentes dinámicas de aprendizaje, pudieron acercarse al misterio de la fe, conocer mejor la Palabra de Dios y su sentido hondo y profundo, real y verdadero…
En dicho taller se les entregó como regalo y símbolo una gafas en las que aparecían escritas las palabras de súplica que pronunció el ciego Bartimeo: “Señor, que vea” (Lc 18). A continuación, nos dirigimos hacia el Seminario para rezar junto a los seminaristas el Angelus. Así los adolescentes pudieron conocer esta bella oración que la Iglesia ora todos los días a las doce del mediodía.
Tras la comida el encuentro continuó con una visita al Seminario Diocesano de Jaén por parte de los seminaristas. Nos estuvieron mostrando las partes del seminario, así como la disposición del edificio en sí, con la Capilla Mayor como eje central, los claustros laterales, la Capilla Menor que es donde los seminaristas pasan, al menos, media hora con el Señor todas las mañanas nada más levantarse y en donde, constantemente, le preguntan qué quiere de ellos, el comedor, la biblioteca repleta de libros y sobre la cual está la Iglesia, los cuartos de los propios seminaristas, la sala de descanso, las clases… Durante la visita nos estuvieron explicando la vida normal de un seminarista, que no es una persona diferente a nosotros, sino todo lo contrario. Nos hablaron de los dos pilares fundamentales de un seminarista: la oración y el estudio. Realmente, nos mostraron una cercanía y normalidad a la que los adolescentes no están acostumbrados. Conocer el Seminario desde dentro, todas las actividades que se realizan en él, el horario que tienen los seminaristas, cuánto tiempo estudian, cuáles son las asignaturas, cómo pasan el tiempo libre… fue una actividad completamente acertada para que nuestros adolescentes vieran que los caminos a los que nos llama Dios son sorprendentes y nunca sabemos qué es lo que nos pasará durante ese caminar. Este aspecto estuvo presente durante todo el encuentro, la importancia de “ver”, de ver con otros ojos, con los ojos de la fe, recogidos en esas espléndidas gafas de colores y con las cuales leímos a Dios en la letra de Manuel Carrasco, la importancia de “ver” qué es lo que Dios nos pone en el camino, saber cuál es el camino que Dios tiene pensado para que logremos esa felicidad que nos tiene preparada… Fueron algunos de los detalles que se recogieron en la oración del final del encuentro cuando todos estuvimos congregados en la Capilla Mayor para despedirnos hasta la próxima.
Kairós va creciendo, poco a poco, pero con una base sólida que es Dios. Este fue un gran encuentro, en el que adolescentes que se conocían de otros encuentros se reencontraron, acompañantes de todo Jaén se embarcaron en los talleres y en esta nueva familia, nuevos grupos Kairós se encontraron con que, realmente, no están solos en su parroquia. Se encontraron con una gran realidad de nuestra Diócesis de Jaén, y es que, esta aventura a la que nos invita Dios, no ha hecho más que empezar y comenzar a crecer…
María Alejo Armijo
Delegación Episcopal de Infancia y Adolescencia
Galería Fotográfica: «Encuentro diocesano de adolescentes Kairós»