Los Obispos del Sur analizan la acogida en sus diócesis de la Exhortación Apostólica «Amoris Laetitia»
19 mayo de 2016En Córdoba, los días 17 y 18 de mayo, se ha celebrado la CXXXIV Asamblea Ordinaria de los Obispos del Sur de España, que comprende las Diócesis de Sevilla, Granada, Almería, Cádiz y Ceuta, Córdoba, Guadix, Huelva, Jaén, Asidonia-Jerez y Málaga. También han participado los Obispos eméritos de Huelva y de Cádiz y Ceuta.
Comenzó la Asamblea con un retiro espiritual, dirigido por Mons. Jesús Catalá, Obispo de Málaga, que ofreció una meditación en torno al don del Espíritu Santo.
Ante el reciente nombramiento de Mons. Amadeo Rodríguez como nuevo Obispo de Jaén, la Asamblea ha tenido palabras de acogida al nuevo Obispo y de agradecimiento hacia Mons. Ramón del Hoyo, que pasará a ser Obispo emérito de Jaén, por su dilatado servicio episcopal a la Iglesia.
Los Obispos han dialogado sobre la presentación y la acogida en sus diócesis de la Exhortación Apostólica Postsinodal “Amoris Laetitia”, del Papa Francisco, publicada el pasado mes de marzo. Se trata de un documento pontificio que ofrece orientaciones sobre la familia, basada en el amor humano que el sacramento del matrimonio santifica. Mons. Demetrio Fernández, Obispo de Córdoba, ha sido el encargado de hacer la presentación del mismo.
En clave de exhortación positiva, alentadora de todo lo bueno que hay en el corazón del hombre, este documento presenta la belleza y la felicidad del amor humano del hombre y de la mujer para la mutua ayuda y felicidad, que incluye la apertura a la vida y la prolongación en los hijos. Tiene la cualidad de abarcar todas las dimensiones de la familia, quiere llegar a todas las situaciones, se hace cargo de situaciones en las que este amor humano no se vive en plenitud y hasta ellas quiere llegar para reconocer lo bueno que ya existe y acompañarlas hasta la plenitud.
Este documento, en línea con el magisterio de la Iglesia en los últimos tiempos, pretende dar respuestas y sugerencias a las nuevas situaciones que aparecen en la vida matrimonial y familiar. El Papa Francisco ha querido llegar a todas estas situaciones, por difíciles que sean, y propone una actitud de acompañamiento y discernimiento para integrar la fragilidad.
Los obispos han valorado muy positivamente la acogida que ha tenido este documento en sus diócesis y, especialmente, entre las familias y las instituciones dedicadas a la pastoral familiar. Lo consideran, además, un instrumento de formación para sacerdotes y laicos, especialmente para la preparación de los novios y el acompañamiento a las familias.
Los Obispos han dialogado ampliamente sobre este documento que, desde la salvaguarda de los principios permanentes, exhala un frescor evangélico que invita a una renovación y conversión pastoral.