Jornada Pro-Templos: «La caridad nos construye como templos vivos»
16 septiembre de 2020
Seguramente, algunos de vosotros estáis pensando que estos no son tiempos para campañas económicas, que no sean las que hagamos para el ejercicio de la caridad y para otras necesidades urgentes. No os falta razón; pero yo espero saber justificar por qué, un año más, convoco la JORNADA PRO-TEMPLOS. Os aseguro que no lo haría si no se hubiera presentado una situación que requiere la comunión cristiana de bienes. De no ser por esa razón, os aseguro que hubiera suspendido esta jornada ya habitual en nuestra Diócesis de Jaén.
Va dirigida la Jornada, como sabéis, a la construcción de templos o la reparación urgente de los mismos, cuando se presenta alguna emergencia. Normalmente la respuesta ante esta llamada a compartir unas parroquias con otras encuentra un buen eco; sobre todo porque se asume la necesidad concreta que se nos expone y, también, porque se valora la motivación que se nos señala.
Este año, la Jornada lleva el lema: LA CARIDAD NOS CONTRUYE COMO TEMPLOS VIVOS. Los templos materiales, esos que cada parroquia ha ido construyendo a lo largo de los siglos para reunirse en la escucha de la Palabra del Señor y en la celebración de la Eucaristía, son el reflejo de la vida comunitaria, que se construye en la fraternidad y la caridad y hace de nosotros templos vivos en los que el Espíritu Santo va conformando la vida de una Iglesia santa y fraterna, a veces con pecados y errores, pero también con sueños de santidad y misión.
En esta ocasión, la urgencia de la ayuda que se solicita a todas las comunidades y que invito a los sacerdotes que la hagan llegar a los fieles del modo más convincente y creativo posible, es la obra de consolidación del templo parroquial de Santiago Apóstol en la ciudad de Jaén. Se trata de un templo joven, muy joven, que está en peligro de cierre y posible derrumbe, si no se hace una obra de consolidación. Unas corrientes de aguas subterráneas, no previstas en su construcción, lo están poniendo en peligro. Se trata de una obra muy costosa económicamente, que la parroquia no puede afrontar sola y tampoco puede la diócesis. Esa es la razón por la que no suprimimos esta Jornada de aportación para templos y, además, os pedimos, especialmente para esta obra una ayuda generosa de todos.
Invito a las parroquias a compartir con esta parroquia hermana con comprensión, generosidad y con un profundo sentido evangélico y eclesial. Evangélico para que sea expresión de una comunión que tiene su corazón en la fe común en Jesucristo que confesamos, celebramos, oramos y servimos a los pobres. Eclesial, porque nuestra colaboración es fruto de la comunión que también alcanza a los bienes que compartimos los unos con los otros, cada cual en la medida de sus posibilidades.
Estoy convencido de que comprendéis lo que os digo y que os ponéis en la situación de los que necesitan nuestra ayuda.
Con mi afecto y bendición.
+ Amadeo Rodríguez Magro
Obispo de Jaén