Homilías de los Domingos 33 y 34 del Tiempo Ordinario
12 noviembre de 2009DOMINGO XXXIII DEL TIEMPO ORDINARIO – CICLO B (15 de noviembre de 2009)
El cielo y la tierra pasarán, mis palabras no pasarán
Descargar Homilía completa
DOMINGO XXXIV DEL TIEMPO ORDINARIO – CICLO B (22 de noviembre de 2009)
SOLEMNIDAD DE JESUCRISTO, REY DEL UNIVERSO
Mi reino no es de este mundo
Descargar Homilía completa
DOMINGO XXXIII DEL TIEMPO ORDINARIO – CICLO B (15 de noviembre de 2009)
El cielo y la tierra pasarán, mis palabras no pasarán
Descargar Homilía completa
Cuando alguien te diga con preocupación y pesimismo: «¿A dónde vamos a llegar?», no dejes de responder como cristiano: «Pues yo no se si Vd. lo sabe, porque yo lo tengo seguro: vamos a la resurrección y a la vida plena, sin límites de bondad y felicidad junto al Señor». Por eso, los cristianos, en cada generación, somos reunidos por el Resucitado cada domingo, para rememorar y pregustar con Él este destino nuestro y de toda la humanidad. Y allí suplicamos juntos, cuando Él se hace presente sobre el altar: Anunciamos tu muerte, proclamamos tu Resurrección, ¡Ven, Señor Jesús!».
DOMINGO XXXIV DEL TIEMPO ORDINARIO – CICLO B (22 de noviembre de 2009)
SOLEMNIDAD DE JESUCRISTO, REY DEL UNIVERSO
Mi reino no es de este mundo
Descargar Homilía completa
Hoy la Iglesia reconoce agradecida ante Dios: En verdad es justo y necesario darte gracias siempre, Padre Santo, porque consagraste Sacerdote eterno y Rey del universo a tu único Hijo y sometiendo a su poder la creación entera, entregara a tu Majestad infinita un reino eterno y universal: el reino de la verdad y la vida, el reino de la santidad y la gracia, el reino de la justicia, el amor y la paz.