La Delegación para el Clero ayudará al Obispo, a los Vicarios y a los Arciprestes en el fomento de la comunión sacerdotal del presbiterio diocesano, así como en la atención y seguimiento de las necesidades espirituales y materiales de los presbíteros y diáconos de la Diócesis.
Las tareas de esta Delegación son las siguientes:
La tarea confiada a la Delegación para el Clero implica diferentes áreas, al frente de las cuales el delegado dispondrá del apoyo de sus coordinadores o directores.
La Delegación contará con un Secretariado para el Diaconado Permanente, que se regirá por: las pautas trazadas por el Concilio Vaticano II, las orientaciones de la Iglesia universal, la normativa de la Conferencia Episcopal Española y las disposiciones que emanen de la Diócesis de Jaén.
El Obispo nombrará al equipo que constituye dicho Secretariado, al frente del cual se encontrará un director, cuya tarea será: coordinar a las distintas personas
comprometidas en la formación, presidir y animar toda la labor educativa en sus varias dimensiones, y relacionarse con las familias de los aspirantes y de los candidatos casados y con sus comunidades de proveniencia.
Las funciones del Secretariado serán: